Primavera 2018 | Año 21 | Número 83
| ARTÍCULOS MÉDICOS

Prevención en la adolescencia

Dra María Carpineta, MN 109629.

La palabra accidente significa "lesiones provocadas sin intencionalidad, que ocasionan daños a las personas y que ocurren en forma brusca o imprevista". El término tiene connotaciones que inducen a una actitud errónea: se asume que los accidentes son producto de la fatalidad o del destino. Actualmente, está claro que estos conceptos son errados y que todos los "accidentes" son pasibles de prevención y control.

¿Cuáles son los diferentes escenarios en los que un adolescente puede estar  expuesto a accidentes evitables? Las causas externas que pueden ocasionar una lesión al adolescente constituyen el principal factor de gravedad al que este grupo etario está expuesto; los accidentes de tránsito representan alrededor del 50% de las muertes, siendo la primera causa de muerte en ambos sexos entre los 10 y 19 años. En cuanto a la distribución según sexo, los varones son más afectados que las mujeres.

Los jóvenes conductores necesitan asesoramiento sobre seguridad vial, además de la aplicación de las leyes que prohíben conducir bajo los efectos del alcohol y las sustancias psicoactivas. Es preciso definir tasas de alcoholemia más bajas para los adolescentes y se recomienda establecer permisos progresivos para conductores principiantes con tolerancia cero para el alcohol al volante.

Mencionar este dato permite visibilizar una realidad, en la que el rol de los adultos no debe ser de alarma, sino que debe apuntar a crear conciencia en los adolescentes, de manera que los accidentes sean evitables.

Las conductas autolesivas abarcan un amplio espectro, desde la ideación suicida, la elaboración de un plan, la obtención de los medios para hacerlo, hasta la posible consumación del acto. Si bien no pueden asociarse de manera lineal y consecutiva, es fundamental considerar el riesgo que cada una de estas manifestaciones conlleva. En la adolescencia, los cortes o autolesiones deliberadas en el cuerpo suelen ser frecuentes y no necesariamente implican riesgo suicida.

Es necesario tener presente estas conductas en la atención de adolescentes recordando que en todo momento se debe respetar su privacidad y confidencialidad. Asimismo, es muy importante que se acuerde con el/la adolescente la posibilidad de convocar a una persona de su confianza a fin de buscar el contacto con un profesional de la salud que lo asista en el proceso de recuperación.

El consumo de sustancias puede ser problemático cuando afecta negativamente -en forma ocasional o crónica- a una o más áreas de la persona: su salud física o mental, sus relaciones sociales (familia, pareja, amigos), el trabajo, el estudio o su vínculo con la ley. Lo que resulta especialmente problemático es la pérdida de control o incurrir en prácticas de riesgo bajo los efectos de una sustancia. Es muy importante desnaturalizar el consumo episódico excesivo y ayudarlos a dimensionar los riesgos que conlleva esta práctica, sin juzgar o poner en riesgo la continuidad de la atención. Es fundamental establecer un vínculo de confianza y respeto con el/la adolescente para consultar con un profesional de la salud.

El alcohol es una droga psicoactiva legal ampliamente consumida por las/los adolescentes en nuestro país. Se entiende como sustancia psicoactiva cualquiera con efectos sobre el sistema nervioso central, con la capacidad de cambiar la percepción, el estado de ánimo y/o el comportamiento. Dado que nadie es igual ante una misma sustancia, los efectos de las bebidas alcohólicas dependen de la graduación que poseen, del contexto, de las expectativas de quien las consume, del estado de ánimo y de las características psicológicas y corporales. También dependen de la cantidad que se ingiera y de otros factores como baja tolerancia, presencia de otras drogas y enfermedades preexistentes.

La prevención también significa posibilitar un espacio para que los adolescentes se pregunten: ¿Qué es ser adolescente en esta sociedad? ¿Qué es lo que yo deseo? ¿Qué puede pasar si lo que quiero entra en conflicto con mis amigos o con mis padres? ¿Por qué algunas veces todo parece ser tan difícil de entender? Un espacio donde los padres podamos escucharlos y hablarles desde nuestra experiencia.

Prevenir un accidente no solo significa evitar que los adolescentes salgan lastimados físicamente, también contempla experiencias afectivas no esperables que pueden provocar dolencias psíquicas; es allí donde el acompañamiento emocional de un adulto, prestando una escucha activa y abriendo espacios de diálogos, amortiguará el golpe que el adolescente inevitablemente vivenciará en la búsqueda de su lugar en el mundo.

   
 

Bibliografía - Abordaje de la morbimortalidad adolescente por causas externas. Paquete de herramientas para el circuito de información. Lineamientos para la intervención integral. Sistematización de experiencias. PNSIA . Ministerio de Salud de la Nación. 2017. - Salud Materno Infanto Juvenil en cifras 2017- SAP UNICEF 2017. - Adolescentes: riesgos para la salud y soluciones. Organización Mundial de la Salud. Disponible en: http://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/adolescents-health-risks-and-solutions - Lineamientos para la atención del Consumo episódico excesivo de alcohol en adolescentes- Programa nacional de adolescencia 2012. - Lineamientos sobre Derechos y Acceso de adolescentes al sistema de salud. Programa Nacional de Salud Integral del Adolescente julio 2015.

 

“Chicos sin alcohol”, la campaña del Consejo Publicitario Argentino que ganó el Premio Santa Clara de Asís.